Desde muy pequeño apasionado de ordenadores y música, como descubrió el Virtual DJ a los 14 nunca dejó de pinchar temas con el ordenador.
En Barcelona ha colaborado con varios artistas underground y pinchado en Barts, City Hall, Razzmatazz y Slow Club entre otros.
Se ha unido al colectivo Dedo en 2012, y con ellos intenta organizar un Tupper cada año mejor.